Los automóviles con más de 10 años sufren esta consecuencia.
Los desperfectos en la chapa y pintura de los vehículos no sólo tienen un componente estético. Tanto es así que los problemas graves son detectados por los técnicos cuando tienes que pasar la Inspección Técnica de Vehículos y son motivo suficiente para suspenderla. Son defectos que ponen en riesgo tu seguridad y la del resto de usuarios de la carretera ¿Cuántos conductores siguen suspendiendo la ITV por fallos en la carrocería de sus vehículos?
Habitualmente el conductor solo valora que las luces alumbren adecuadamente, el motor funcione bien y las ruedas no estén desgastadas. Los rechazos a vehículos a consecuencias de defectos graves en la carrocería aumentaron casi un 30% en los últimos cinco años, según un estudio de CertifiedFirst, que aglutina a expertos en chapa y pintura.
¿Qué requisitos debe cumplir la chapa del automóvil para superar con éxito la ITV?
En primer lugar, es muy importante que la carrocería no presente ni corrosión ni óxido. El capítulo capítulo 2 del Manual de Procedimiento de Inspección de las ITV indica que mediante inspección visual se comprobará “el estado estructural del chasis y de la carrocería prestando especial atención a los efectos de oxidación o corrosión y a eventuales problemas de sujeción.
La corrosión se podrá verificar mediante presión en el lugar afectado para evaluar su importancia. Esta comprobación incluirá la verificación de la ausencia de reparaciones inadecuadas”. Es decir, “la carrocería debe estar libre de defectos que puedan afectar a la integridad del vehículo o a la seguridad de las personas”, tal como explica este documento oficial.
Otro detalle importante es que los parachoques deben estar sujetos y en buen estado “prestando especial atención a la detección de aristas vivas o cortantes”. Los espejos y los cristales del vehículo tampoco pueden presentar fisuras, dado que es motivo suficiente como para no pasar la inspección.
Por último, se valorará el estado de las puertas, poniendo especial atención en “la existencia y el estado de las puertas, bisagras, manillas y montantes” y deben estar libres “de aristas cortantes y grietas o fisuras que puedan poner en peligro a las personas o dificultar su función”.
Fuente: https://www.superdeporte.es/
Recuerda revisar tu vehículo antes de la inspección ITV, clave para la seguridad vial.