Medir la presión de los neumáticos es algo que se debe hacer con regularidad, pero, especialmente, antes de iniciar un viaje. Son el único elemento en contacto directo con la carretera y su incidencia en el rendimiento del vehículo es sustancial. Antes de proceder, hay una hay un punto muy importanate a tener en cuenta: la presión de los neumáticos hay que medirla en frío, ya que el aire dentro del neumático tiende a expandirse por efecto de la rodadura y la medición puede ser incorrecta. Así que es mejor que acudas a la gasolinera más cercana a ti y evitar recorrer más de tres o cuatro kilómetros para realizar una correcta medición de la presión.
Igualmente, debes medir la presión en llano. No lo hagas con una rueda sobre un bordillo, en una cuesta en la que todo el peso del coche recaiga sobre uno de los ejes o en cualquier situación en la que los valores puedan ser poco fiables.
Para saber cuál es la presión ideal de tus neumáticos, tendrás que consultar el manual de instrucciones del vehículo.
Presión de las ruedas delanteras: con carga normal y a plena carga.
Presión de las ruedas traseras: con carga normal y a plena carga.
El valor que verás suele ser en bares. Si hay otro, verifica que coincida con las escalas en tu aparato de medición.
- Prepara el manómetro: coloca tu coche cerca del manómetro, que suele estar en la zona de Aire y Agua de la gasolinera. Sitúate justo al lado o delante, según la posición y asegúrate de apagar el motor y echar el freno de estacionamiento.
- Retira los tapones: quita los tapones de las ruedas, incluida la de repuesto, si tienes, y guárdalos en un lugar concreto para no perderlos.
- Insufla el aire: ahora tienes que coger la manguera y colocar la boca de ésta en el pitorro de la primera rueda. Introdúcelo con suavidad y hasta el final. Al principio, escucharás el sonido del aire. A continuación, insufla aire, comprobando la presión en la máquina y ajustándola a los valores recomendados por el fabricante.
Ahora solo tienes que repetir este proceso en el resto de las ruedas. No olvides la rueda de repuesto, ya que, si sufres un pinchazo y tienes que recurrir a ella, debe tener la misma presión o afectará a la seguridad y al consumo.